Metro les dijo a los clientes que esperaran un servicio de trenes reducido al menos hasta el final de la semana.
Todos los trenes de la serie 7000, aproximadamente el 60% de la flota de Metro, fueron retirados del servicio el lunes, mientras continúa la investigación por un descarrilamiento la semana pasada en la Línea Azul. El servicio reducido probablemente durará al menos hasta el domingo, dijo Metro en un comunicado el lunes.
“A partir de mañana, los trenes operarán cada 15 minutos en la Línea Roja y continuarán operando cada 30 minutos en todas las demás líneas. Los trenes de la Línea Silver operarán entre Wiehle-Reston East y Federal Center SW, únicamente”.
Todos los trenes tendrán seis vagones. Metro alentó a los clientes a considerar alternativas como Metrobus.
El pasado martes 12 de octubre un tren se descarriló entre las estaciones del cementerio de Rosslyn y Arlington. Una persona fue trasladada a un hospital con lesiones leves, dijo Jennifer Homendy, presidenta de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), una de las organizaciones que investiga el incidente.
Durante una conferencia de prensa el lunes, señaló que el tren se descarriló al menos otras dos veces ese día.
El investigador de la NTSB, Joe Gordon, indicó que las ruedas del tren se movieron hacia afuera en su eje, lo que hizo que se descarrilara durante los cambios. WMATA ha estado al tanto de los problemas de ensamblaje de ruedas en trenes desde 2017, dijo Homendy y agregó que Metro encontró dos fallas en 2017, dos en 2018, cuatro en 2019, cinco en 2020 y luego 18 en 2021. Eso fue antes del viernes, explicó Homendy, y las inspecciones de la NTSB iniciadas ese día revelaron 21 fallas adicionales para un total de 39 en lo que va del año, “lo cual es significativo”, señaló. También hizo hincapié en que las cifras son preliminares porque se habían inspeccionado aproximadamente 514 de los 748 vagones de la serie 7000. La junta no fue notificada de las fallas anteriores antes de la investigación actual, agregó.
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